jueves, 27 de julio de 2017

AIS, SEÑOR

No sé si lo habré dicho con anterioridad, pero me gusta mucho Splatoon


You are a kid nowww, you are a skid nowww...

Ese famoso juego de disparos en primera persona que supuso una bocanada de aire fresco para Nintendo y su consola Wii U. Duró poco, sí, pero demonios, cómo lo disfruté. Como un enano. Bueno, la cosa es que su continuación, Splatoon 2, ha salido al mercado para la consola Switch. En mi entrada sobre dicha consola dije que a mi juicio, ese juego podría haber salido perfectamente para la Wii U. Pero, seamos honestos, eso sería algo imposible.





Bueno, la cosa es que, después de haber visto unos cuantos vídeos sobre el juego en cuestión... Leñe, es que tiene buena pinta. Muy buena.

Como he dicho al principio, me lo pasé muy bien con el primer Splatoon, es más, suelo jugar con él (aunque Xenoblade X me quita bastante tiempo entre misión y misión) y disputo unas cuantas partidas, siempre con una sonrisa en la cara mientras me bato el cobre con otros jugadores. Lo considero a día de hoy como el Team Fortress 2 de Nintendo. Por su parte, Splatoon 2 tiene elementos atractivos, como la mejorada personalización de los avatares, las armas nuevas, el modo historia. Pero hay un factor importante. Uno que siempre me echa para atrás y me recuerda la realidad.

Pagar por jugar en línea.

Y Splatoon 2 tiene no solo un modo historia, sino uno para disfrutar combates por Internet, el primordial, la razón por la que te lo compras.

Eso es lo que me fastidia un poco. El juego pinta bien, me gusta, se nota a la legua que es igual de divertido que el primero, mas tener que desembolsar una tasa de 20 euros al año... Ciertamente, es poco dinero comparado con otras plataformas (Xbox Live Gold vale 3 veces más) Aún así, si antes jugar por Internet con la Wii U era gratis, ¿por qué no mantener eso? Cierto es que hasta el 2018 no entrará en vigor la cuota de suscripción, pero ahí tenemos el ya mencionado Team Fortress 2. Hace unos años se hizo gratuito, y jugar con él no precisa de una cuota mensual. Simplemente cuenta de Steam, bajar el juego y a dar caña. 

¿Por qué este giro? No lo sé, supongo que como Sony y Microsoft lo habían hecho, no le quedaría otra a Nintendo. Pero leches, es que me da pena, porque Splatoon 2 se ve tan bien que... Ais, señor. Os digo en serio que si jugar en línea con la Switch fuera gratuito, me pensaría adquirirla para probar Splatoon 2. Aunque bueno, no olvidemos que no se sabe nada de la continuación de Xenoblade Chronicles X, así que aún con esas me lo pensaría mucho. Sí, también se anunció un Metroid Prime, pero... Eso, que tendría que meditar largo y tendido. También está el hecho de que ya no suelo jugar tanto como antes (si acaso a títulos antiguos, de esos que te sabes de memoria, te queda un porcentaje por completar o tiene modo en línea) y que leer o ver series me atrae ahora más, así que si me pillase la Switch no la tocaría mucho. Y ya tengo unas cuantas consolas en casa, por lo que... No lo veo. Splatoon 2 mola, pero no me llama tanto la Switch. 

¿Señor, por qué me hago estos debates? ¿Acaso llegará el día en que deje de realizarlos?


Bueno, este mastodonte me podría ayudar a dejar de comerme la cabeza... Y DE VIVIR.



PD: Leyendo por ahí, parece ser que van a mantener el servicio en línea del primer Splatoon.









ESPECIAL QUINTO ANIVERSARIO IV - MILLION DOLLAR BABY



La primera película dirigida por Clint Eastwood que me vi fue Gran Torino. Me gustó mucho, y aún la recuerdo con gran cariño. Digo esto porque mucha gente me recomendó Million Dolar Baby, incluidos mis padres. Así que, teniendo en cuenta cómo me pareció Gran Torino, decidí incluirla en la encuesta, para poder echarle un vistazo.

Y tras eso, puedo decir que me ha gustado. Pero no sé por qué, prefiero Gran Torino.

La historia trata sobre una chica, Maggie, cuya vida es lamentable, que desea entrar en el mundo de boxeo, y es entrenada por Frankie, forjando con él una gran amistad e incluso amor paternofilial. Junto a Frankie está su amigo Eddie, un antiguo boxeador que también se hace amigo de Maggie. 





Bien. Si ya lleváis un buen tiempo leyendo mis andanzas por la Internete, sabréis que este tipo de historias me atraen. Y sí, leñe, repito que esta película me ha gustado, no obstante, creo que Gran Torino estuvo mejor. Cierto es que no soy para nada experto en el cine de Eastwood (sólo me he visto dos cintas dirigidas por él así como La muerte tenía un precio, y ya) pero tenía muchas expectativas con Million Dolar Baby, y en parte, se han cumplido. El tercio final de la película es brutalmente trágico, y la decisión final es una que creo que muchos, por desgracia, nos hemos hecho alguna vez en la vida. La relación entre los personajes principales está muy bien hecha, se ve que se sienten como padre e hija, y los combates son intensos y no dejan casi respirar. Maggie simboliza las personas que jamás se rinden, que lo dan todo por sus sueños, mientras que Frankie representa la gente que no quiere perder a los que ama, porque ya ha sentido ese dolor, y es algo insoportable. Pero como he dicho antes, Gran Torino me pareció mucho mejor. Ambas cintas poseen muchos paralelismos, como la relación paternofilial, qué significa de verdad la familia y tomar una decisión final por los que se quiere, sí; aún así, quizá por su mensaje crítico acerca de la hombría y la violencia, o que Clint me resultaba mucho más sombrío y amargado que en Million Dollar Baby, me decanto más por la otra cinta. Aunque eso no quiere decir que Million Dollar Baby me haya parecido mala, reitero; es un gran filme, logra transmitir y conectar, te preocupas por sus personajes. Si tuviera que sacarle algún fallo es la narración de Morgan Freeman, no por su presencia (sus cavilaciones sobre el boxeo son maravillosas, me recordaban a las de Cadena Perpetua, también preciosas) sino porque a veces cuenta eventos que no hacen falta narrar puesto que solo con ver la escena ya sabes qué está ocurriendo (por ejemplo, cuando Clint coge el teléfono y le dicen que si su pupila luchará contra la campeona y responde que no le interesa, Morgan nos explica que rechazó dicha llamada, pero yo ya lo sé, no hace falta decirlo, es más, solo con la cara de Morgan Freeman la escena hubiera quedado genial) Y no hace falta decir que el doblaje en castellano es EXCELENTE. 

Así que en definitiva ¿Me ha parecido una buena película? Sí, en efecto, y la recomiendo a todos los que le gusten el séptimo arte. De hecho no he metido más destripes de los que ya he puesto porque no quiero arruinar el visionado a todos aquellos que la tengan pendiente. Así que vedla, que merece la pena. 

miércoles, 26 de julio de 2017

ESPECIAL QUINTO ANIVERSARIO III - GENERATION KILL



NOTA: Ligeros DESTRIPES incluidos (una escena y el final) Si no la habéis visto, os recomiendo visionarla antes de leer la reseña. Es una serie corta, en una semana la acabáis. Y es muy buena, qué leches. Vedla ya. 




Hay un género en el anime que se denomina slice of life. Literalmente "rebanadas de vida". Existen artículos que explican de qué van dicho tipo de obras, como este, en el que se define como "el arte de convertir en drama lo cotidiano de la vida". Otra página indica que esas series "se ocupan de las pequeñas cosas de la vida, las pequeñas luchas y las pequeñas victorias que el hombre promedio encuentra cada día". Algo parecido se nos dice en este vídeo. Pero sin duda alguna me quedo con la definición de esta página: "el narrar el día a día que viven sus personajes".

Me atrevería a decir que la serie que nos ocupa, Generation Kill, pertenece a este género, aparte del dramático, bélico y etc. Es un slice of life, un "recuento de la vida", pero con soldados. 

La historia, basada en la del libro homónimo del escritor Evan Wright, trata sobre un cuerpo de marines en la Guerra de Irak y su día a día. Sus quejas. Sus pequeñas victorias. Cómo se comportan entre ellos. Lo que piensan de todo esto. Porque la mayor parte de los episodios, que son siete de una hora cada uno, se basa en eso. Hay pocas escenas de acción (creo recordar que más o menos unas cinco o así) pero las que hay son intensas. No obstante, eso no es el plato fuerte.

Antes de proseguir, me gustaría comentar el único punto negativo que esta serie presenta, a mi juicio. Es un poco liosa. En numerosas ocasiones hay cambios drásticos en las órdenes de los altos mandos, así como cambios de escenario muy drásticos y a veces me perdía ("¿No iban a esta zona? ¿Ahora se dirigen a esta ciudad?  ¿Y este quién es? Creo que no he seguido lo que ha pasado...") De igual modo, hay muchos personajes, y no me he quedado con los nombres de todos ellos. Aunque eso tampoco es algo grave. He disfrutado muchísimo con esta serie, puesto que sí que me he quedado con lo importante: cómo son sus protagonistas. Al final los conozco. 

Ese es el plato fuerte de esta obra. Te metes en la vida de unos soldados, casi como si fueras su compañero o un periodista; personajes que tienen momentos buenos, pero también malos. Al final, se iguala la vida del guerrero con la del civil, salvo por la diferencia de que el primero mata. Pero igual que ocurre con nosotros, los actos dejan huella, y en su caso, es una huella enorme que difícilmente se podrá borrar. La serie no es solo un producto contra la guerra, sino también un toque de atención, que nos dice que los soldados son iguales que nosotros, personas, que sufren y padecen, no son máquinas. Y ese mensaje lo dicen sus propios protagonistas con una honestidad tan brutal que cala hondo, con frases y diálogos que te dejan en profunda reflexión.




Pero aparte de los malos momentos, también se puede vislumbrar una gran camaradería entre los personajes. Hacen bromas, dicen chorradas, se meten unos con otros y disfrutan de los buenos ratos de tranquilidad que escasamente se presentan en su vida, superando todo lo agridulce que esta puede mostrar, puesto que no todo es amargo. Como hacemos nosotros. El día a día.





También hay una gran crítica a los altos mandos que ejercen una autoridad excesiva, que son cuestionados muchas veces con buen criterio por sus nefastas decisiones,  hasta tal punto de que los personajes principales afirman que si caen, serán por dichos gerifaltes. Tampoco quiero meter más destripes de los que ya he incluido, pero os podéis hacer una idea de eso. 

Y luego, tenemos ese final.



Me encanta esta escena. En primer lugar, porque suena el gran Cash  en el único momento con música de la serie (bien jugado, mis señores) Y en segundo lugar, y más importante, porque aquí se comprueba que estos soldados sí son personas. No les gusta lo que han hecho. Lo repudian, al principio lo ven y les emociona, pero conforme se reproduce el vídeo se van, como pensando si han hecho lo correcto. La canción de Cash habla de un hombre que apunta los nombres de la gente y decide quién libera, quién culpa. Quién vive, quién muere. Lo que han estado haciendo los protagonistas con sus armas. Al inicio de la serie ellos no se dan cuenta de eso, de hecho se quejan de que no van a matar a nadie, de que no entran en una batalla. Al avanzar Generation Kill, podemos ver que dudan y piensan sobre sus acciones, sí, pero es en esta escena cuando sus actos arremeten contra ellos, contra su conciencia, con una enorme fuerza, inconmensurable. 

En fin. Qué más puedo decir. Me ha gustado muchísimo esta serie. No tira a lo épico, a lo dramático, sino a la vida, a lo real. A lo que esta representa, pero con los soldados. Gracias a series como esta, puedo acercarme a ellos y comprenderlos mejor. Son personas con problemas, que sufren los embates de la vida y la llevan como mejor pueden. Cuya vida cambiará radicalmente cuando vuelvan del frente. Ya no volverán a ser los mismos. 

Como nosotros, tras algunos momentos. 


martes, 25 de julio de 2017

ESPECIAL QUINTO ANIVERSARIO II - WATCHMEN





¿Qué pensarías si vieras un día a Superman, ya sea volando, o salvando a la gente?

Quizá que es un buen tipo. Que se alegra de ser quien es y de lo que hace, que carece de grandes problemas, o si los tiene los resuelve como todos, etc. En definitiva, es una persona alegre y feliz.

¿Y si, por el contrario, es un tipo desagradable, amargado, que hace de superhéroe porque no tiene nada mejor a lo que aspirar, que uno de estos días o se suicida o nos matará a todos en alguna de sus batallas contra sus enemigos, que están igual de mal o peor que él?

Más o menos, eso es Watchmen

Un cómic de superhéroes cuyos protagonistas son nada más ni nada menos que personas disfrazadas que están totalmente ROTAS, que conforman una historia que no es para nada placentera de leer. Porque dan pena. 

Cuando Watchmen salió, allá por los años 80, supuso una revolución para el mundo del noveno arte, convirtiéndose en uno de los tebeos más importantes de la historia, y para algunos, el mejor que se haya escrito sobre superhéroes. Tenía muy altas expectativas con esta novela gráfica, y la verdad es que se han cumplido, puesto que hace muchísimo tiempo que no disfrutaba tanto leyendo un cómic de superhéroes. No solo de su argumento, sino también de la narrativa visual que presenta. 

¿Y qué narra Watchmen? Bueno, su historia nos pone en un contexto de una realidad alternativa en la que existen "superhéroes" que han sido decisivos para algunos conflictos como la Guerra de Vietnam. Y si pongo superhéroes con comillas es que el único que podría reunir esas cualidades es el Doctor Manhattan, un ser con poderes tales como el control de la materia, poder visualizar el futuro y teletransportación, mientras que el resto son simples personas disfrazadas. Entonces, se produce el asesinato de El comediante, uno de esos justicieros, lo que hace que otro de ellos, Rorschach, comience una investigación, con la que cree que alguien quiere matar a todos los vigilantes que quedan vivos. 

Vale. Parece algo típico.

Pero al igual que en MTMTE, esto es más de lo que el ojo puede ver. 

Porque como dije al principio, todos sus protagonistas, los que se suponen que son defensores de la ley, del débil, que buscan solo la justicia, están DESTROZADOS, son seres desequilibrados, con pasados traumáticos que en casos como el de Rorschach lo han marcado de por vida, o que no saben cómo lidiar con las emociones humanas más allá de un punto puramente racional, como el Doctor Manhattan (que por ejemplo, achaca los cambios de parecer de las personas a "fenómenos termodinámicos") Incluso algunos se han unido a este grupo de justicieros porque o bien han sido obligados, como Espectro de seda, o porque tienen tanta fortuna que no saben qué hacer con su vida, caso del Búho Nocturno. No son los adecuados para este trabajo, pero por desgracia es lo único que tenemos para "salvar el mundo". Muchas veces he oído la frase de tenemos lo que nos merecemos, y creo que con este cómic encaja a la perfección, porque además de los protagonistas, en la obra vemos otros personajes que también lidian con lo suyo en un marco donde puede dar comienzo la tercera guerra mundial.

He mencionado al principio la narrativa visual de Watchmen. Se puede resumir con una sola palabra: detalle. En todo el cómic se usa una plantilla de 3x3, juntando en algunas páginas unas cuantas viñetas para remarcar algunas escenas (como la de la presentación del Doctor Manhattan) pero no se varía en exceso su forma para, por ejemplo, crear las típicas viñetas inclinadas de acción. Simplemente son rectángulos que varían su tamaño, y ya. Pero aún así, se logra dar dinamismo a la obra. Hay algunos capítulos que por su parte, juegan mucho con la disposición de las viñetas, como el de Aterradora simetría, o con la repetición de escenas, como el de El relojero. Además, durante muchos números se va sucediendo la narración de un cómic, Relatos de el navío negro, que un chaval lee en un quiosco. Nosotros sabemos lo que está ojeando gracias a los cuadros de texto (que parecen pergaminos arrugados) descubriendo no sólo que es una historia con un argumento semejante al de Watchmen, sino que la mayoría de los sucesos que el chaval lee concuerdan exactamente con lo que sucede a su alrededor en la ciudad. La virgen. 

En definitiva, Watchmen es una de esas obras que atrapa, que ha marcado un antes y después en la industria, deconstruyendo el género de los superhéroes con un reparto de personajes atrayente y que sin duda tiene un reconocimiento merecido. Si no lo habéis leído, cosa que dudo, ya estáis tardando. Y si queréis más información al respecto, os aconsejo que veáis el análisis de Dayo sobre la película, que la compara con el cómic y da algo más de información de la que yo he proporcionado, aunque con muchos destripes, por lo que solo lo recomiendo una vez leída la novela gráfica. Además también está la entrada sobre su narrativa de This blog ends with you, así como la reseña de Estudios DeFrikis, y este texto de Comicrítico. Pensaba comentar el final del cómic porque es uno de esos que te deja con el culo torcido, pero prefiero que vosotros mismos lo leáis.

PD: Mencionando la película, no, no la he visionado y no puedo opinar sobre si es buena o mala adaptación, aunque un amigo mío me la recomendó, así que quizá uno de estos días la veré.








lunes, 24 de julio de 2017

ESPECIAL QUINTO ANIVERSARIO I - EL SEÑOR DE LAS MOSCAS




Bueno, pues empezamos esta serie de reseñas en conmemoración del lustro de este blog con una de las novelas más conocidas de la literatura. El señor de las moscas. La verdad es que le tenía ganas a este libro. Muchos amigos míos hablaban de él con asiduidad, así que decidí darle una oportunidad. 

La cosa es que es la primera novela que me leo dos veces. No porque me haya parecido la mayor maravilla de las letras, sino porque quería pillarle... más sentido. 

¿A qué me refiero? Bueno, empecemos con el principio.

Si habéis visto un episodio de Los Simpson en el que Bart y sus compañeros se pierden en una isla desierta, esa es básicamente la sinopsis. Aunque el contexto histórico difiere, puesto que se supone que se desarrolla en el marco de La Segunda Guerra Mundial, dado que por ejemplo, se hace referencia al lanzamiento de una bomba atómica, pero no se nos aportan ningunas fechas. De igual modo, no sabemos mucho de los personajes, sólo algunos recuerdos (como los del protagonista, Ralph) y que son todos británicos. Eso la verdad no me supuso ningún problema a la hora de leer esta obra. 

Lo que sí me dificultó su lectura fueron las descripciones de los lugares. Dios mío.

Esto es algo que no me había pasado desde que leí los libros de Canción de hielo y fuego. Comprendo que explicar cómo son los espacios en una novela no es lo mismo que en un cómic o película, puesto que estos dos últimos medios juegan con la ventaja de poseer imágenes, pero mientras leía la novela de Golding, no podía hacerme a la idea de cómo eran las zonas que exponía. Al principio iba bien, pero tras dos líneas, me perdía. Es curioso, porque con por ejemplo, Ensayo sobre la ceguera, las descripciones no me supusieron tal problema, podía hacerme una idea sobre cómo eran los sitios donde estaban los personajes. Y estamos hablando de Saramago, que escribe todo seguido y tienes que leerlo todo de una pasada para no perder el hilo. Pero con El señor de las moscas...

Así que efectivamente, en parte me la leí dos veces para ver si podía tener una mejor imagen mental sobre los emplazamientos (cosa que no ha sucedido, por desgracia) Y en parte me la volví a leer para comprender mejor no tanto su mensaje, sino su simbolismo.

Veréis, esta novela es muy simbólica. Si la habéis leído, sabréis de qué hablo. Pero para los que no, y a riesgo de realizar unos destripes, los personajes que posee, al menos los principales, representan una faceta humana. Por ejemplo, Ralph es el sentido común, o más bien la democracia. Piggy, por su parte, el raciocinio, y Simon, a la bondad, siendo una referencia a Jesucristo. Esto último no lo descubrí en mi primera lectura, sino buscando unos cuantos datos tras esta en la Internete. Por eso, para este análisis, decidí leer otra vez esta novela, para ver si pillaba algo más de significado a su simbología. En parte creo que lo he conseguido, y me alegro de haber hecho eso. Además, he encontrado un atractivo muy interesante en esta relectura. Golding emplea en numerosos pasajes de la obra metáforas, lo cual los hace mucho más atractivos, y en los momentos en los que detalla cómo viven la vida los niños en la isla (los juegos, sus sentimientos, cómo van cambiando...) es un placer, mucho más ameno y evocador que las ya mencionadas descripciones de los entornos. Otro puntazo es que a veces, Golding hace referencias a algunos hechos que han ocurrido con anterioridad en la historia pero de un modo muy sucinto, como si con dos palabras ya supone que sabes de qué está hablando, no necesita volver a contarlo todo mascado. Te obliga a recordar fuertemente lo acaecido. 

Hablemos ahora de la violencia de El señor de las moscas, sin duda lo más conocido de esta novela. La cosa es que le eché un vistazo a la reseña en This blog ends with you y al leer que "apenas hay violencia en el libro [...] cuando la hay es muy contundente", pensé que sería un texto de los que no podría continuar leyendo, o al menos tendría reparos para seguir. 

Pero no. 

Llamadme insensible, pero las escenas violentas que hay, de las cuales sin duda destacan dos, no me parecieron tan brutales como por ejemplo en  El club de la lucha, o, de nuevo, Ensayo sobre la ceguera. En estos dos libros sí que notas la violencia. La sientes de un modo visceral, brutal, orgánico. Sobre todo con el texto de Saramago, en el que algunos pasajes eran bastante desagradables, exponiendo cómo puede llegar a ser el hombre en los momentos más críticos. Supongo que como Golding la publicó en el año 1954, ya era suficientemente violenta en su época con lo que tenía, pero ahora... En cuanto a su mensaje, si el ser humano es violento por sí mismo o por culpa del medio, la verdad es que lo que he sacado en claro es que todo humano posee una sombra. Y esa sombra es lo peor que tenemos, que sale a relucir cuando nos tocan las narices. 

Tras estas líneas podréis suponer que El señor de las moscas no me ha gustado. En retrospectiva, el hecho de releerlo me ha hecho ver mucho más de la novela, comprender más algunas de sus facetas. Pero no la considero una obra maestra como dicen. Una novela interesante, sí, pero me ha dejado un poco frío. Si os soy sincero, creo que tenía muy altas las expectativas. Quizá si le echáis un vistazo podéis sacar otras conclusiones diferentes, incluso que os guste más que a mí. 

sábado, 22 de julio de 2017

EL FINAL DEL VIAJE: RESEÑA DE "LA GUERRA DEL PLANETA DE LOS SIMIOS"



Hace unos cuantos años, salió en los cines El origen del planeta de los simios, una película que pese a varios factores, como que sus avances la destripaban casi en totalidad y que en cierto sentido, no se sentía del todo necesaria, logró gustarme. Tenía buenos efectos especiales, una historia decente, personajes carismáticos y un final apocalíptico: los simios campaban a sus anchas y la humanidad sufría los estragos de un experimento fallido. Pasaron los años y se estrenó la siguiente entrega de la saga, El amanecer del planeta de los simios. Igual que con la primera parte, me hice la pregunta eterna: "¿Era necesaria?" La verdad es que no, pero, siendo honesto, fue una cinta que me encantó. Superó con creces a su predecesora, narrando una historia con unos personajes atractivos que te mantenían pegado a la butaca deseando saber más. Fue una de las mejores películas que vi en el año 2014, mostrando así que esta franquicia, pese a que nadie la pidió, tenía algo que decir. No era un largometraje de acción con la que el estudio conseguiría dinero, al contrario, esta segunda entrega te dejaba reflexionando sobre la naturaleza humana y daba un mensaje muy actual acerca de nuestra especie. 

Y aquí estamos. La tercera parte de esta saga, el "supuesto" final, que me ha dejado con un buen sabor de boca... Aunque no me ha parecido igual de excelente que la anterior. Pero eso no quita que a mi juicio tenga aspectos muy positivos que incluso la segunda parte no poseía, aspectos de los cuales vamos a hablar a continuación.

Aquí va a haber destripes menores, que creo que no arruinarán el visionado. Aunque si lo consideráis, podéis ver primero la cinta y luego la reseña. 

Lo primero es que si habéis visto la crítica de Días de cine (programa que recomiendo) os habréis dado cuenta de que consideran a este filme como un viaje introspectivo. Y en efecto, así es. Más que su antecesora. De hecho, tiene muchas similitudes con El corazón de las tinieblas. Por un lado, la presencia del coronel, que como Kurtz, es un hombre imbuido en el misticismo, casi la deidad, que domina a un ejército de humanos que no está dispuesto a compartir ni un pedazo del planeta con los simios. Por otro lado, el viaje de César, en busca de dicho coronel para vengarse por haber matado a su familia. En este periplo se le presentan alucinaciones y comienza a reflexionar sobre su propio odio, llegando a ver que se está convirtiendo en algo más peligroso, dominado por las emociones y sin atisbo de raciocinio, solo venganza. En el camino se cruzará con un chimpancé solitario que puede hablar (y que recuerda mucho a Gollum) y a una niña muda con la que el sabio orangután Maurice (mi personaje favorito de la saga) y luego el resto de la familia de simios se encariña. De hecho, con esa niña tenemos uno de los elementos más atractivos de este largometraje y que no estaba tan presente en la segunda parte: muestra mucho. Y eso es interesante dado que da pie a numerosas reflexiones por parte del espectador. 

Si nos referimos a  los personajes, estos son tan buenos como de costumbre, destacando César, en el cual se hace palpable su evolución y cómo sus deseos de resarcimiento le están pasando factura. La niña contribuye, como antes he comentado, a mostrar. Al inicio mediante su mirada y curiosidad, luego aprende a usar el lenguaje de signos para comunicarse con sus compañeros. Otra de las bazas es el coronel, que no llega a ser un villano al uso (sus motivos pueden ser legítimos aunque cuestionables, sí) pero infunde un aura de misticismo, llegando a ser el antagonista humano más interesante de la saga, dado que en la primera no había ninguno y en la segunda no tenía tanta presencia como Koba. Y cómo olvidarme de mi personaje preferido de estas cintas, Maurice, el orangután. Cierto es que no tiene tanta presencia como en las anteriores entregas, al menos que yo recuerde, pero me encantan las escenas en las que sale (cuando encuentran a la niña, las charlas que mantiene con César, y la promesa que le hace al final) Sencillamente, es un personaje que adoro.

Dentro del apartado técnico, tenemos una increíble captura de movimiento, que hace a los simios mucho más reales, notándose el avance de esta técnica desde la primera entrega.  La banda sonora es de Michael Giacchino, que participó en la segunda entrega. Aquí consigue unos resultados bastante buenos, con toques de piano que llegan al alma. 


Ahora, voy a comentar algunos aspectos de la cinta que requieren DESTRIPES a mansalva. Así que cuidado.

Si tuviera que decir algo malo de este largometraje sería sin duda la huida del campo de concentración. Se supone que guardan simios inteligentes, así que la vigilancia debería ser máxima... Pero los simios logran escabullirse con una facilidad pasmosa. Supongo que al final con esto nos muestran que los humanos infravaloramos demasiado a estos seres, y eso nos pasa factura, pero aún así... Tampoco quiero ser un crítico que destroce todo, mas creo que debería haber sido una huida con mayor peligro, más difícil, que no se sintiera tan fácil. Eso por ejemplo, se veía más en la segunda entrega, había una mayor tensión. Otra cosa que me escamó fue la elección de algunos temas de la banda sonora en ciertas escenas, en las que creo que debería haber primado o temas más suaves o el silencio (como cuando cabalgan por la playa)

Y ahora, un chiste. El título dice "La guerra". Pero la gracia está en que no es una guerra entre simios y humanos, como podríamos habernos imaginado, sino que la mayor batalla de la cinta es entre Homo sapiens. Me explico. El virus que antes mataba humanos y hacía a los simios inteligentes ahora provoca que los primeros se vuelvan primitivos, perdiendo el habla (lo cual conecta con la cinta del 68) En esta situación, el coronel ve como única vía viable exterminar a aquellos que padezcan ese síntoma, para prevenir la propagación del agente. Por supuesto otros militares no ven con buenos ojos su juicio, dando así pie al conflicto. 

Esto, honestamente, me parece un buen golpe. Rompe con tus expectativas sobre la cinta, puesto que te esperas la batalla definitiva entre hombres y simios, pero no, al final es lo de siempre. Nuestra especie no se entiende, nunca logrará un acuerdo por medios pacíficos y lo único que puede hacer es matar a sus propios congéneres (como sucedía en The end of Evangelion) Es algo muy triste si lo piensas bien, y arriesgado para una cinta como esta, en la que nos imaginábamos que la madre de todas las guerras hombre-simio iba a ocurrir. Pero lo máximo que tenemos es la lucha entre el coronel y César, y, en ultima instancia, la que mantiene este último con su sed de venganza. Ah, y los últimos compases, con el ruido que se va oyendo poco a poco, el ruido de la avalancha brutal que mata a todos los soldados (una escena sorprendente) así como la llegada de los simios a su nuevo hogar y la muerte de César... Sin duda, la mejor parte de la película. 


En definitiva, es una buena cinta, un producto notable y muy recomendable, sobre todo si os gustaron las anteriores. Sigo prefiriendo la segunda (puso el listón muy alto y le dio identidad a esta franquicia) pero este largometraje es un perfecto cierre para un proyecto que aunque nadie pidió, al final ha conseguido ganarse un gran respeto.











lunes, 17 de julio de 2017

AVISO IMPORTANTE SOBRE EL QUINTO ANIVERSARIO

No encontré una imagen mejor y me apetecía poner algo de Evangelion
¿Qué? ¿Pasa algo? ¡¿EH?! ¡¿EHH?! ¿EHHHHHH?!


Bueno chavales, hay un cambio de planes. Si recordáis, para el jueves 27 estaba previsto que pusiera el análisis de Cowboy Bebop. Por desgracia, aún no he empezado la serie, debido a que estoy muy liado con las tareas finales del máster de ilustración que estoy cursando, y a fin de poder realizarlas con éxito, me veo en la obligación de posponer dicho análisis hasta que esté más libre para ver ese anime. Así pues, el jueves 26 en vez de la reseña de Cowboy Bebop, pondré el análisis de Million Dolar Baby

Paso ahora a responder algunas preguntas que seguro que os estaréis formulando:

-"¿Entonces, más o menos, sabrías decirnos una fecha aproximada de la crítica de esa serie?"
No lo sé con exactitud, pero posiblemente me ponga a verla para finales de julio (29 en adelante) que es cuando entrego las tareas. Así que si no me demoro mucho, puede estar para inicios de agosto, o quizá mediados. De todos modos, os informaré del progreso vía Twitter

-"¿Seguirás actualizando el blog?"
Sí, pensaba hacer alguna que otra entrada simple, pero lo dicho, todo depende de cómo vaya con las tareas.

Pues nada, disculpen las molestias, y hasta la próxima. 

viernes, 14 de julio de 2017

CARS 3




Mirad, esta entrada está llena de DESTRIPES por un tubo. Va a ser una masacre, en serio. Así que pregunto.

¿Queréis ver Cars 3? Si vuestra respuesta es afirmativa, dejad la entrada, e id a verla. Ya volveréis cuando la hayáis visionado.

En caso contrario, podéis proseguir en paz. Eso sí, nada de echarse para atrás.

Al lío.



Hace unos cuantos años, vi un partido de tenis entre Nadal y Federer. No me considero un seguidor de ningún deporte, pero lo que me sorprendió fue su final, cuando daban los premios, puesto que vi por primera vez a un Roger Federer llorando ante la derrota.



La cosa es que el hecho de que un deportista como Federer llorase no fue muy bien visto, al menos eso recuerdo. Y me chocaba, porque yo he llorado con la derrota, ya sea al suspender un examen, no ganar una fase de un juego, cuando veo que no avanzo con los estudios... La derrota sirve para aprender, sí, pero también para recordarnos que a veces, por muy duro que luches, no podrás ganar. Que puedes caer de la cima cuando alguien quiere arrebatártela. Es ley de vida, demonios. Aún así, puedes ayudar a las nuevas generaciones, transmitirles tu sabiduría. Caminamos sobre los hombros de los gigantes que nos precedieron, ¿verdad?

De eso versa Cars 3

Que esta cinta tuviera este mensaje era algo que deseaba, al haber visto los anuncios sobre el filme en cuestión. El protagonista perdiendo, siguiendo un entrenamiento para demostrar que aún le queda fuelle, y de pronto se da cuenta de que no puede, que hay que dejar a los nuevos... Sí, joder, por qué no. Pero otra parte de mí me recriminaba que fuera tan ingenuo e incluso gilipollas; ¿cómo podría pensar que la tercera parte de Cars poseyera esa lección, lección  a los críos, que es el público principal de este producto, les iba a aburrir? Cosa que por cierto, ocurrió, en mi sala. Pero bueno, eso lo dejaremos para más adelante. Vayamos con el argumento.

Rayo está disputando una de sus carreras, cuando descubre a un novato que es un portento, y que consigue arrebatarle el triunfo en todas las competiciones. En uno de los circuitos, Rayo sufre un accidente terrible por el cual su trayectoria parece acabada. Es entonces cuando conoce a Cruz Ramírez, una entrenadora profesional que ha forjado a numerosos novatos y que está dispuesta a ayudar a Rayo a remontar este bache (¡ja! toma chistaco) Como es de suponer, el entrenamiento no funciona, Rayo discute con ella porque ve que no avanza y se desvela que Cruz quería ser desde siempre una corredora, pero que nunca se atrevió a dar el paso. Así, Rayo decide ir con el entrenador de Doc, su ya fallecido maestro, y tras afrontar unas duras pruebas, decide ir a una nueva carrera. Es en ese momento cuando se da cuenta de que él ya no puede seguir en esto, pero Cruz sí, así que le cede el testigo y ella gana la competición. Tras eso, Rayo se convierte en su mentor, como en su día fuera Doc. 

Vale, es cierto que muchos avispados olerían ese argumento nada más haber visto los avances, de hecho eso casi pasa conmigo, como ya he explicado antes. Pero eso no quita que su mensaje haya sido, al menos para mí, algo nuevo, e incluso yo diría arriesgado, teniendo en cuenta que quienes más van a consumir esto son los niños. Y la verdad es que los que estuvieron en la sala se estaban aburriendo, y por consiguiente convirtiendo la experiencia cinematográfica en un maldito caos. El hecho es que no me esperaba una lección así de una franquicia como Cars, casi más enfocada a vender juguetes y cuyas cintas han sido lanzadas en escasos intervalos de tiempo; sobre todo si comparamos con otra gran saga de Pixar como Toy Story, cuya tercera entrega salió una década después de la segunda (mientras que con Cars esa separación fue de seis años) Es más, si soy sincero, no me disgustaron las películas de Aviones, basadas en su universo, y la segunda me pareció un producto digno (que tiene un mensaje más o menos parecido al de Cars 3)

Otra cosa que me ha sorprendido es el doblaje. Repiten las mismas voces, sí, pero para los nuevos personajes han añadido otras nuevas. Cosa normal, pero dichas voces son las mismas que han doblado a series como Johnny Test, Lego Nexo Nigths y El amanecer de los croods. Cierto que las escuché en el último avance, pero no pensé que las pondrían. Y la verdad es que hacen un gran trabajo. Son unos actores de doblaje que saben cómo transmitir. 

Si tuviera que señalar algunos fallos, son quizá algunas situaciones, que me han parecido muy... cómo decirlo. Para llamar la atención de los niños, sacarles unas risas. La mayoría están protagonizadas por Mate, cosa que me da pena porque en la primera cinta lo recordaba como un personaje menos pesado. No obstante, el mensaje de Cars 3 me ha parecido tan bueno, tan... inesperado, o al menos, increíble que lo hayan lanzado en esta cinta, como deseaba, que solo por eso, ya me ha parecido una buena película. No la mejor del estudio, sino la mejor de la trilogía. Incluso me atrevería a decir que me ha gustado más que Toy Story 3. En serio.





En fin, una cinta veraniega menos. ¿Cuál podría ser la siguiente?